Cementerio de elefantes presidenciales

La hipótesis del texto es que hoy en día “La política como vocación se agota en un par de mandatos presidenciales”. El inicio de un mandato presidencial inicia y termina la carrera política de la persona, cuando en realidad debería significar el inicio de algo importante pero también la continuación de sus responsabilidades aun cuando fuera en otro cargo político público de menor importancia, aprovechando así las experiencias y aprendizajes que tuvieron.

Compartir el conocimiento ha sido la base de una sociedad a lo largo de la historia. La única forma en la que el hombre puede mejorar es entendiendo su historia, aprendiendo de los errores que otros cometieron para así no repetirlos, cosa que la mayoría de los mandatarios de algunos países no entienden. Por ejemplo, ¿Qué es lo que pasa con los presidentes después de mandato? Para los presidentes el tiempo que dura su mandato es el principio y el fin de su carrera. Después de ser presidente la mayoría simplemente se retira de este ambiente político, ya sea porque sienten que difícilmente pueden llegar a lograr algo tan importante como lo que fueron y construyeron durante su mandato, o por simple acto de conformismo, pues también tienden a creer que ya lograron la meta máxima de su vida, que ya lograron todo lo que podían y que no hay nada más por hacer, en pocas palabra se quedan endiosados con ellos mismos.

Después de finalizar un mandato, la persona cuenta con una infinidad de nuevas ideas y contactos que si quisieran podrían aprovecharlas y aplicarlas de diferentes maneras en el servicio público. El encanto de la política no termina en ser presidente, la política como tal es velar por el bien y los intereses de los demás, y esto se puede hacer a través de otro cargos políticos, que si bien nunca tendrán la misma importancia y peso que tuvieron durante su tiempo como presidentes, pueden seguir teniendo algún tipo de impacto en la sociedad.

En México, como lo menciona el texto, no se ha tenido a ese expresidente ideal y esto en gran parte se debe al problema de corrupción que tenemos en el país, pues si bien dejaron su “trono” no dejaron sus palancas y privilegios de lado.